El Programa de Salud Mental de la Escuela de Salud Pública de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile expresa su rechazo al anuncio del Sr. Subsecretario de Redes Asistenciales, Sr. Arturo Zúñiga, acerca de la decisión de instalar camas de hospitalización psiquiátrica de referencia nacional, para niños y niñas, en el Hospital Psiquiátrico Dr. Philippe Pinel de Putaendo.
Como cuerpo académico señalamos que esta medida contradice toda evidencia científica y consenso disciplinar en materia de recuperación de salud mental, pues desarraiga a niños y niñas de sus familias, comunidades, escuelas y otros espacios de inclusión, exponiéndoles al aislamiento, segregación y estigmatización. Los problemas de salud mental de niños y niñas son, en gran medida, el resultado de graves vulneraciones a sus derechos, requiriendo respuestas terapéuticas y de rehabilitación que precisamente apunten a la inclusión social y el pleno disfrute de esos derechos, involucrando a sus redes familiares, sociales y otros servicios comunitarios. La hospitalización debe ser una de las últimas medidas, estrictamente transitoria y situada en hospitales generales próximos a sus residencias. Razones de salud pública, eficiencia terapéutica y protección de derechos fundamentan estas orientaciones, que la evidencia y consenso internacional avalan.
En el marco de nuestra misión formadora, reafirmamos nuestro mensaje a profesionales y técnicos que conforman los equipos de salud mental a lo largo del país, en particular quienes se han formado en las aulas de la Universidad de Chile: la importancia del ejercicio laboral en un marco ético, de profundo respeto por las personas, de la rigurosidad científica que exige el abordaje de los problemas de salud de la población, de la responsabilidad sobre los recursos públicos. La medida anunciada atenta contra todos estos principios.
Más allá de las disciplinas, como ciudadanía debemos acordar que el aislamiento en una institución psiquiátrica apartada a su entorno social y comunitario es un evento altamente perjudicial para cualquier persona, mucho más para niños/as y jóvenes. Como ciudadanía debemos defender enfática y transversalmente que este tipo de prácticas no se reproduzcan en nuestra sociedad, mucho menos en nuestras instituciones de salud.
Contra todo sentido, la medida de instalación de camas psiquiátricas se sitúa en contraposición con las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, con el propio Plan Nacional de Salud Mental conducido por el Ministerio de Salud e incluso completamente desencajado del Acuerdo Nacional por la Infancia celebrado por el gobierno en mayo del año recién pasado. Para el Programa de Salud Mental de la Escuela de Salud Pública, este acuerdo representó un avance en materia de políticas públicas en favor de la niñez, y es incomprensible la medida anunciada.
El anuncio del Sr. Subsecretario de Redes Asistenciales en un grave retroceso. En ninguna de las 94 propuestas del Acuerdo Nacional por la Infancia se contempló de modo alguno instalar camas de hospitalización de niños y niñas en un Hospital Psiquiátrico. Tampoco se incluyó la estrategia de centros de referencia nacional para un problema extendido a lo largo y ancho del país, vinculado en su origen y posibilidad de solución a las condiciones concretas de vida de esos niños/as, jóvenes y sus familias. En este contexto el gobierno declaró el objetivo de "poner a los niños en el primer lugar de las prioridades del Gobierno y del país”, señalando que "este Acuerdo Nacional por la Infancia constituye una hoja de ruta sobre la que el Gobierno se encuentra trabajando para proteger a aquellos que han sido vulnerados y para promover el desarrollo integral de todos los niños y niñas de nuestro país". Consideramos que la medida en cuestión representa un serio retroceso a los acuerdos institucionales y sociales alcanzados.
Solicitamos al Sr. Subsecretario de Redes Asistenciales que la medida anunciada sea detenida, y se evite un grave error en materia de políticas públicas de salud en favor de la infancia. Solicitamos a la autoridad honrar la palabra señalada respetando el Acuerdo Nacional por la Infancia.
Celebremos el día mundial de la salud mental, 10 de octubre, contribuyendo en la dirección correcta por la salud mental de niños y niñas, evitando reproducir las vulneraciones a la infancia con esta decisión equivocada. Preguntémosle a los niños y niñas dónde y con quiénes quieren estar cuando enfrentan un proceso de recuperación de la salud. Protejamos el desarrollo integral de los niños y niñas en Chile.
Académicos Programa de Salud Mental
Olga Toro Devia
Ruben Alvarado Muñoz
Esteban Encina Zúñiga
Carlos Madariaga Araya
Alberto Minoletti Scaramelli
Rafael Sepúlveda Jara
Gonzalo Soto Brandt
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