Salud Mental en Todas las Políticas

Estrategia de colaboración desde la ESP permitió apoyar a equipos de Salud Mental de 29 territorios a nivel nacional.

Estrategia de colaboración desde la ESP apoyó a equipos de SM

La sesión de clausura de los “Conversatorios de salud mental en contexto Covid19”, organizados por Programa de Salud Mental de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Chile, junto al Departamento de Salud Mental del Ministerio de Salud, permitió hacer un recuento del aporte temprano que tuvo esta iniciativa en la orientación colectiva para la respuesta a la pandemia; y compartir algunas reflexiones críticas junto al Dr.Benedetto Saraceno, destacado referente mundial de salud mental, quien realizó la conferencia central, lo que dio paso a compartir preguntas y reflexiones con los asistentes.

Olga Toro, jefa del Programa de Salud Mental de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Chile, y coordinadora de la iniciativa, señala que “estos conversatorios fueron los primeros webinar sistemáticos y permanentes del país y partieron apenas dos semanas después de declarada la pandemia. La inspiración fue apoyar de manera práctica a los equipos de salud mental en los 29 territorios sanitarios de Chile, los temas de conversaciones fueron enfocados en la acción y necesidades de los equipos de salud mental del país. El uso de evidencia publicada era limitado dada las características de la pandemia, pero se generó un espacio en donde se pudo difundir de manera rápida lo disponible”.

En total se realizaron 12 reuniones, donde se abordaron temas tales como: atención a distancia, manejo de problemas mentales en confinamiento, consumo de alcohol y drogas, organización de los servicios y la continuidad de la atención. Dentro de la dinámica se destacó que fue muy necesaria la opinión de equipos de diversas ciudades de Chile y del mundo, por lo que también fue un espacio en el que expusieron experiencias, aciertos y errores, intercambiando estrategias valiosas.

“Podemos decir que vivimos la experiencia de tres meses de trabajo intenso, estoy orgullosa de la capacidad que tuvimos al trabajar de manera colaborativa, pues desde la declaración de pandemia de la OMS, pasaron dos semanas y ya estábamos conectados con los equipos de salud mental de las 29 zonas sanitarias del país, en un trabajo colaborativo del programa de Salud Mental de la Escuela de Salud Pública, el Departamento de Salud Mental del MINSAL y el apoyo clave de la Unidad de TIC para la Innovación Educativa” detalla la académica.

Cabe señalar, que todo el material presentado en los encuentros, ha sido puesto a disposición del público general y se encuentra en el repositorio del Conversatorio aquí.

Reflexiones en Pandemia

Las profundas reflexiones críticas del Dr. Saraceno sobre la fragilidad de la respuesta global a la pandemia, el problema hospitalicentrico de los sistemas de salud, la falta de democracia en los sistemas de salud y el rol clave de la atención primaria y el trabajo local; lo llevó a conclusiones clave sobre los retos a los sistemas de salud, como es no confundir la respuesta a problemas agudos con la respuesta de emergencia; instalar políticas públicas provenientes de debates democráticos y el reto de transformar los servicios de salud.

Para Olga Toro entonces, esta mirada “nos interpela para reflexionar sobre nuestra realidad, por ejemplo que, al constatar los errores cometidos por los países más ricos, si mantenemos los errores en la toma de decisiones, las cosas pueden empeorar, más allá de la disponibilidad de recursos. Ya las necesidades expresadas por la población, las demandas de equidad se vienen manifestando antes del estallido social, nuestros problemas de salud mental están íntimamente ligados a las condiciones sociales de la población, por lo que el generar una respuesta errónea ahora puede ser caótica y de graves consecuencias para la paz social".

Es importante el foco sobre el fortalecimiento del modelo de atención comunitaria, fortalecer los equipos de centros de atención primaria y centros de salud mental comunitaria, no se debe cometer el error de reducir los recursos a los servicios hospitalarios. La salud mental pasa en la comunidad de las personas, en su relaciones y afectos, no en hospitales, ni solo con ventiladores mecánicos. Esta situación nos demuestra que hemos ido demasiado lento y aunque siempre hay compromisos de los diferentes gobiernos en salud mental, estos no se han cumplido y se mantienen brechas importantes en el sistema. Se requieren señales claras en el presupuesto público en este sentido, enfatiza la académica.

Se hace necesario evaluar nuevas formas de participación de las personas en los sistemas de salud, de entregar capacidad de decisión a las personas en su territorio, no ser consumidores de atención, sino empoderar a los ciudadanos, de fomentar la consideración de elementos colectivos y públicos para incidir en la organización y reorganización del sistema de salud. La necesidad de democratizar los sistemas de salud se hizo evidente en la pandemia. Ahora nuestro desafío es contribuir en visibilizar a los usuarios de los servicios de salud mental y sus derechos.

Finalmente, es clave en salud mental, que debemos seguir aprendiendo nuevas formas de salud en la comunidad, volver de verdad al territorio. Es evidente que la salud mental está más allá de los propios sistemas de salud, de allí que la consigna debe ser clara y concisa: “Salud Mental en Todas las Políticas”.

Últimas noticias