En su discurso, el Dr. Arteaga destacó el crecimiento en el área de investigación, enfatizando el aumento de las publicaciones de los académicos de la ESP, las cuales se han duplicado desde 2010 a la fecha, así como el incremento gradual de proyectos de investigación financiados por fondos concursables, ya sea a nivel nacional, a través de Fonis y Fondecyt, como internacional, a través del Consejo de Investigación de la Unión Europea, NIH de Estados Unidos, Fogarty, o en proyectos bilaterales, con la Universidad de Columbia o Birmingham, entre otros.
Al respecto relevó las herramientas que la Escuela ha puesto a disposición de sus académicos para alcanzar este avance, como el Fondo de Investigación establecido por la ESP para apoyar el desarrollo de proyectos, lo que ha permitido el apoyo para la preparación de proyectos de mayor envergadura, entre otros; un sistema de incentivo por publicación; y una modalidad de incentivo a investigadores productivos.
En relación a los programas de formación de postgrado subrayó su excelencia y prestigio, lo se expresa -dijo- en que todos ellos han sido acreditados por la agencia reguladora del Estado, CNA y “tienen una demanda que supera los cupos disponibles, hasta en una relación de 4 postulantes por cupo disponible en algunos de ellos”.
Asimismo señaló que “como una manera de mejorar la respuesta a las necesidades que tiene el país”, la ESP ha impulsado la creación de nuevos programas como los magísteres en salud ocupacional, administración de salud y especialidad médica en medicina del trabajo, todos los cuales se encuentran en trámite de aprobación en las instancias superiores de la Universidad.
En docencia de pregrado dio cuenta de la presencia activa de la ESP en la innovación curricular de la Escuela de Medicina, la cual ha establecido la Salud Pública como uno de los 4 dominios básicos, así como en la propuesta de cambio de paradigma de organización de la docencia a nivel Facultad en torno a un eje formativo común en Salud Pública igual para las 8 carreras de la salud de la institución.
En vinculación con el medio, aseguró que la Escuela “ha logrado posicionarse como un actor al que se le reconoce liderazgo en diversas materias propias de la salud pública”.
En ese sentido destacó que en 2011 la Escuela impulsó la constitución de la Red Chilena de Instituciones Formadoras en Salud Pública, que hoy agrupa a 20 universidades del país, instancia que la ESP condujo y de la que constituyó su Secretaría Ejecutiva. Además, relevó que la ESP es representante de las Escuelas e instituciones formadoras en Salud Pública de Chile en la Red de Escuelas de Salud Pública de UNASUR y que, en 2012, se le otorgó el estatus de Institución Nacional Asociada a OPS para la colaboración internacional.
A nivel internacional, subrayó que el Programa de Salud Global “ha jugado un rol fundamental en la constitución de la Alianza Latinoamericana de Salud Global, ALASAG”.
En el ámbito local, aseguró que los académicos de la ESP “son buscados por los medios de comunicación como referentes en temas de nuestra especialidad” y enfatizó la participación de algunos docentes en comisiones presidenciales, como que muchos de ellos sean “invitados regulares a comisiones del Parlamento, Ejecutivo y organismos internacionales”.
En el área de la diseminación del conocimiento, el doctor Arteaga relevó el fortalecimiento del trabajo editorial, a través de la creación de una línea editorial en salud pública, inédita en el país, y que ya cuenta con 3 libros publicados.
Finalmente en el ámbito institucional, destacó el aumento de las jornadas completas equivalentes de académicos de 36,34 en 2010 a 50,95 en 2015. “Este incremento resiste los análisis de productividad con que hoy se juzga a las organizaciones. En el análisis de la Dirección Académica de la Facultad, que ha cruzado recursos disponibles y diferentes productos académicos en docencia e investigación, nuestra Escuela es una de las 4 o 5 unidades académicas de la Facultad, en un universo cercano a las 50, en la que las variables de recursos y productividad académica cuadran perfectamente y, por lo mismo, es reconocida como académicamente productiva”, afirmó.
Marta Hansen